Hotel Rural A Velha Fabrica

No hay mejor hotel en toda Sierra de Gata. Las instalaciones magníficas, el entorno inmejorable, y lo mejor de todo, el personal y el bizcocho de Esther. Carlos, Esther y el resto del personal no pueden ser más amables. Las habitaciones fantásticas. La comida igualmente magnífica. Absolutamente recomendado para familias, amigos, celebraciones. Mil gracias por todo.

El lugar un sitio perfecto para desconectar en la naturaleza, el trato inmejorable desde que entramos, asta la salida, fuimos con nuestra perrita y nos ayudaron a que ella pasara también una buena estancia. REPETIREMOS SEGURO!!! Mil gracias por vuestra acogida. Posdata: Os recomiendo que cojáis la experiencia de la almazara en esta época y disfrutar de la transformación del aceite

Un hotel con mucho encanto emplazado en plena naturaleza de la Sierra de Gata, con un servicio de restaurante para deleite de sibaritas. El personal inmejorable, muy atento y simpático a la vez que familiar. Tenéis que venir a visitarlo, desde aquí podrás recorrer los pueblos con encanto de la sierra y bañarte en las piscinas naturales.

Muy buen lugar para pasar unos días de descanso en familia. Las habitaciones familiares son amplias. La piscina muy tranquila. El desayuno fantástico y el restaurante ofrece un magnífico menú, con la opción también de comer a la carta a un buen precio. Los empleados muy agradables, por lo que estamos muy agradecidos por su trato cercano. Con todo ello, hay cosas en las que se debe mejorar para lograr la excelencia. 1) La habitación nuestra era muy oscura. Las luces eran escasas y pobres. 2) Hacía calor dentro de la habitación y el descanso nocturno no fue satisfactorio. A pesar de contar con un split, su potencia no es la adecuada como para lograr una temperatura confortable en las camas de arriba. 3) Las camas individuales de arriba no eran cómodas y el cabecero estaba suelto. 4) Falta personal. En el comedor no daban abasto las dos personas para atender. Solo por su profesionalidad y pericia conseguían atender a todas las mesas. Además, en recepción nunca había nadie, por lo que nos fue imposible preguntar sobre los sitios a visitar por la zona (la chica de recepción era la misma que atendía en el restaurante). Con todo ello, es un lugar bastante recomendable.

Luisa y manuel.estuvimos en el puente de agost.nos gusto mucho. Las instalaciones muy bonitas.Todo fue fenomenal.el trato de todo el personal excelente y queremos hacer mención especial a Cesar por su amabilidad y el trato recibido.un saludo.

Una estancia maravillosa, como siempre. Un sitio que nos hacen sentir como en casa y donde siempre que podemos nos encanta volver. El personal del hotel es atento y encantador,la comida buenísima y los postres caseros deliciosos. Rodeado de un entorno maravilloso con piscinas naturales.