Vieraskäyttäjä
3. heinäkuuta 2025
Amplio, limpio y el personal encantador,siilencioso. Como dato anecdotico la recepción cierra a as 16,30, no queda nadie. El restaurante cierra sobre las 10, cierra las puertas y no queda nadie en el hotel, eso significa que si hay 5 personas alojadas somos los únicos que quedamos, ni pensar quiero que no haya huéspedes y me quede sola en toda la finca. Hay calefacción en las habitaciones porque el frío es impresionante, estamos en Julio y no puedo utilizar la terraza por el viento huracanado es helado, llevaros ropa de abrigo. Hay pocas habitaciones y por consiguiente pocos huéspedes. El desayuno tiene lo necesario sin grandes expectativas, no es el bufet de un macrohotel, es lo justo. La limpieza diaria bien hecha, las camas extra grandes, la habitación muy amplia, la pena es una terraza imposible de utilizar. La recepcionista encantadora igual que la camarera del desayuno y la camarera de habitación. Las vistas hacia el campo de viñedos, la húmedas es grande , y el viento insufrible
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