Barceló Punta Umbría Beach Resort

Agradável

Después de muchos años yendo al mismo hotel en familia, este año nos ha decepcionado totalmente. Han recortado en muchos servicios que personas que vayan por primera vez no apreciarán, pero que los que llevamos yendo más de 10 años nos hemos encontrado. No es nada económico como para que recorten así. Todo lo contrario. En fin, decepcionada después de tanto tiempo

Hemos salido bastante decepcionados con nuestra estancia en este hotel, especialmente teniendo en cuenta el prestigio con el que se promociona. Para empezar, las toallas no se sustituyen hasta que han pasado cinco días. Si se desea un cambio antes de ese plazo, hay que pagar un sobrecoste de tres euros, lo cual nos ha parecido un detalle poco apropiado en un hotel de esta categoría. Otro punto que nos llamó la atención fue el tema del agua: no se facilita ni una botella de cortesía. Tienes que comprar una botella inicial si deseas rellenarla en los dispensadores repartidos por el recinto. No entendemos cómo algo tan básico no está incluido. Además, hay una política muy poco práctica en los puntos de comida: solo te permiten hacer un pedido por persona con un máximo de dos artículos. Si quieres algo más, tienes que volver a hacer la cola, lo cual no tiene mucho sentido, sobre todo cuando hay bastante gente. Por otro lado, la políticas de asignacion de restaurantes, entre los diferentes restaurantes que tiene el complejo, creo que no es acertada, crea un desconcierto en el cliente y genera el tener que estar perdiendo el tiempo en cambios de restaurantes a menos que comulgues con lo que te asigan algo que no es muy logico. No obstante, no te ponen inconvenientes en los cambios que solicitas del restaurante asignado, pero siempre tienen la misma frase: "Todos los restaurantes tienen la misma comida", algo que no es cierto despues de estar una semana probándolo todos, y precisamente donde siempre sirven el almuerzo y te asignan por defecto, es el Estero, donde tanto la comida como su presentación es nefasta. Durante nuestra estancia conocimos a una pareja que ya se había alojado en este hotel el año pasado, y nos comentaron que han notado una clara degradación en los servicios, así como en la calidad de la comida en algunos de los restaurantes del complejo. Esto nos confirma que no ha sido solo nuestra impresión. En cuanto al personal y el staff, 0 pegas, mucha amabilidad y atencion de camareros y personas del servicio. En definitiva, ha sido una estancia por debajo de nuestras expectativas. Esperábamos más cuidado en los detalles y un servicio más acorde con el nivel que se le supone a este establecimiento.