Hostal León Dormido

Mi mujer y yo sólo venimos a dormir pero el habitación está bien lo que pasa el problema Colcho está caducada que debería poner nuevo. Atención está bien y decoración como años 70.

Gratamente sorprendidos, íbamos por cinco días, con miedo, y nos gustó tanto el lugar como el entorno, que nos quedamos dos días más. Gracias a todos, en especial a Veronica, que estuvo siempre dispuesta. El restaurante, excelente, en calidad y precios. Todo muy prolijo y super limpio. Volveremos, sin dudas! Griselda y Alfonso.

El Bar-Restaurante muy cálido, limpio y acogedor. Los bocatas espectaculares.. también hacen muchos desayunos y platos calientes tipicos de la zona.Es un hostal ubicado en plena naturaleza cerca de muchas rutas

se nota que a avido un cambio de direccion en los desayunos y las comidas en general se esta muy bien y esta todo muy bueno,las habitaciones son muy comodas pero lo mejor q hay rs el restaurante esta todo buenismo y se esta de lujo

¡NO USE ESTE CAFÉ! Llegamos sobre las 15h, entramos y nos sentamos en una mesa junto a la ventana a la vista de la barra donde trabajaban dos personas. No se atendía a ningún cliente. Después de diez minutos me acerqué y me paré en el bar donde la mujer estaba contando el dinero de la caja registradora y el hombre estaba preparando la comida. Ninguno de los dos me reconoció de ninguna manera. El hombre me pasó para llevar algo de comida a una pareja al final de la barra, les habló, pero todavía no me dijo nada. Entró un hombre con un niño, y la mujer parada frente a mí se volvió y le habló, pero aún no me reconoció. Llegó otra camarera, pasó junto a mí para ir detrás de la barra, habló con los otros dos, pero no conmigo. El colmo fue cuando el hombre recogió una bolsa de basura, me pasó y salió a fumar un cigarro. En ningún momento nadie me habló, ni un "hola", nada, a pesar de que habían hecho contacto visual varias veces. Es como si yo fuera invisible. Nunca antes desde que vinimos a vivir a España hemos experimentado tal descortesía. Cuando salimos después de perder más de quince minutos, pasamos junto al hombre que fumaba afuera. Todavía no dijo nada.

This was the cheapest hotel that was close to Guadalest and Algar Waterfalls (only 30 and 15 or so minutes respectively). Inside the hotel there is also a bar. The service was outstanding - I arrived at the hotel half an hour after check-in closes by accident but (I presume the owner) Rosa called a colleague at the hotel and allowed me to enter and check-in late. I also used the wrong credit card and she was happy to help me reverse my payment and charge my other credit card (which was the one that had the insurance for the trip). The room was clean and the water pressure in the shower was very good.