rosadd03
15. elokuuta 2022
El hotel (entre los Navalucillos y Robledo del Buey) tiene unas vistas preciosas y la zona de la piscina es ideal, con servicio de bar, música y cómodas hamacas. El restaurante con menu para alojados y raciones tiene dos salones para las comidas y la preciosa terraza para las cenas. Ofrecen menú y carta con raciones y todo esta realmente bueno, las carnes buenísimas, mi felicitación al personal de cocina, la rapidez en servir un 10. Desde mi punto de vista les falta una carta de comida ligera para las cenas, tipo sándwiches, hamburguesas, montados o similar ya que para familias de 5 o más, comer y cenar aunque delicioso, sale caro. El único mal sabor que nos llevamos son las habitaciones 13 y 14, ambas comunicadas y que dan justo encima de la cocina y patio de la misma. Por el día la habitación 14 huele a cocina, pero bueno, eso tampoco es tan importante, sin embargo, conciliar el sueño en esta habitación una noche víspera de festivo es totalmente imposible por el ruido que hace el personal y por el ruido del extractor de la cocina, que no dejo de sonar hasta la 1:00 de la mañana aproximadamente. Obviamente el personal de cocina tiene que hacer su trabajo y tiene su derecho a hablar y bromear a las 12:30 de la noche, pero el hotel debería advertir de esta situación para aquellas personas que buscamos silencio a partir de las 12.
Käännä