Hostería El Coirón

Excelente atención, nos sentimos muy pero muy a gusto en el Hotel, cada gesto e interés de todo el staff para que nos sintiéramos cómodos tanto en organizarnos excursiones, solucionando las comidas, consiguiendo cosas para mi hijo!! Solo puedo estar más que agradecido con todos, Ludmila, Rocio, Gala, todas las chicas muy pero muy atentas. Gracias y sin duda volveremos a esa ciudad increíble.

フレンドリー

El hotel es impecable: habitaciones cómodas y muy confortables, con todo lo necesario para un buen descanso. El desayuno es completo y casero. Incluye una hora de uso “privado” de spa y sauna por habitación. Todos los servicios son de buena calidad. Para destacar: la atención eficiente del personal de recepción.

Todo perfecto, la atención ,las instalaciones , el desayuno. Sin duda volvería. Si bien no está en el centro de Esquel, tranquilamente se puede llegar caminando a cualquier parte. Recomiendo las habitaciones del primer piso, son menos ruidosas durante la mañana.

Excelente. Parece que la hostería fue hecha a nueva hace un tiempo por un incendio y realmente es de primer nivel. Eramos 2 familias de diferentes generaciones, 10 personas en total. Estuvimos en habitaciones triples y cuádruples. Las habitaciones eran enormes, muy espaciosas, con separación por pared y muy buena distancia entre el sector de la cama matrimonial y el sector de las camas individuales. Eran prácticamente suites grandes de dos habitaciones en una. No puedo dejar de hacer hincapié en el tamaño y la excelente disposición de estas habitaciones, que me llamaron mucho la atención. Los colchones, blanquería y baños eran nuevos y de primer nivel. Los colchones eran La Cardeuse, marca top de colchones en Argentina que ni siquiera tengo en mi casa. Las toallas blandas mullidas y las sabanas impecables. Se nota que era todo de calidad. Baño y grifería todo hecho a nuevo, elegante y con estilo. En una de las habitaciones la presión de agua de la ducha estaba bien; en la otra creo que era un poco limitada pero eso puede verse. El shampoo, acondicionador, gel de ducha y jabón liquido para las manos era orgánico de una marca que he visto en otras hosterías de lujo en el sur. La calefacción era excelente y el internet tenia muy buena velocidad. Podíamos trabajar tranquilamente desde la pieza. La habitación tenia pava eléctrica, cafe y te. Un frigobar hubiera sido util pero permitían usar la heladera y freezer de la cocina, cosa que hicimos en multiples ocasiones, a veces temo que demasiado. La hostería tenia desayuno (al menos, nosotros lo teníamos incluido), que era completo y tenía muchas opciones saludables. Toda la panadería era casera; de hecho, del comedor salía a la tarde un aroma a pan casero y a pastries porque parece que preparaban todo eso a la tarde. El buffet del desayuno consistía en cafe, infusiones, leche, leche de almendras, yogur de vainilla y de frutilla, 2-3 tipos de cereales y granola, varias clases de pan, facturas, masitas y tortas (todo casero), queso crema y mermelada, tabla de quesos y fiambres (Brie, queso azul, queso de maquina, otras 2-3 clases de quesos estilo ingles, jamón cocido, bondiola, salamín (todo de buena calidad), tomates cherry y aceitunas), canasta de frutas (kiwi, manzana verde y roja, banana, uvas, naranja, mandarinas, lo que hubiera de estación o consiguieran) y huevos (revueltos, duros u omelette). Vi otras reviews de épocas anteriores donde mencionaban que el desayuno era limitado pero esto claramente cambió porque este era sumamente completo. Me hubiera encantado que la hosteria tuviera un restaurant porque claramente cocinan muy bien pero había uno muy bueno a dos cuadras y tambien nos facilitaban el comedor y nos daban vajilla, cubiertos, vasos y servilletas cuando comprábamos, a la noche, comida hecha y comíamos en el comedor. Hicimos esto la mayoría de los días porque íbamos con niños pequeños que volvían cansados de esquiar. A las 19:30 o 20 horas ya estábamos cenando y yéndonos a la ca

Habitaciones amplias e impecables. La cama, almohadas y su ropa de muy buena calidad. La ambientación muy cálida y todo funciona a la perfección. La más destacable la atención de Andrea en la recepción. Al llegar nos atendió con una sonrisa explicándonos todos los servicios y ofreciéndonos recomendaciones para cenar después de un largo viaje. El desayuno muy completo y con un servicio muy cordial. Sin lugar a dudas volviera a parar en este hotel