Vieraskäyttäjä
17. heinäkuuta 2023
Para ser un restaurante de carretera, a las 14:00 horas ya no tenían varios platos, pedimos dos codillos y eso era repugnante estaban en mal estado y olían y sabían a carne en mal estado, así se lo hice saber a la camarera quien los retiro sin hacer un solo comentario y pedimos un nuevo segundo plato, merluza a la romana y el resultado muy pasado y sabor típico a fritanga, como frito en freidora con el mismo aceite donde se frien todos los pescados y rebozados. Acompañado todo ello por una atención pésima del personal del restaurante y toda la escusa que me dieron es que la cocinera era nueva. Por mi parte recomendaría un inspección sanitaria a ese local, posiblemente encontrarían mas de una sorpresa
Käännä